viernes, 16 de julio de 2010

CASEN y Crónica de una forma errada de ver la sociedad

Estadísticas más o menos, análisis técnicos más o menos, el resultado de la Encuesta CASEN 2009 los pobres aumentaron en Chile y eso no es un juego.

Lo peor de todo es que fue en una época en que:

- El Valor del Cobre llegó a precios históricamente altos.

- El Estado contó con una chequera fiscal históricamente abultada.

- Existió una coalición gobernante que contó incluso con mayoría en ambas cámaras (después el desorden los desarticuló).

- Una Presidenta que contó con el 80% del favor en las encuestas.

Por lo que hoy la única conclusión a la que se puede llegar es que el modelo de Concertación no sirve para generar riqueza, terminar con la pobreza y ponernos como país desarrollado.

De este fracaso se descuelgan otros indicadores como alza en la delincuencia, aumento en drogadicción, etc.

El Gobierno del Pdte. Piñera y el ideario político social que representa, ha puesto el énfasis en la eficiencia del uso de los recursos, tanto fiscales como de la Sociedad en un todo.

Lo que se criticó que los nuevos gobernantes (Ministros, Subsecretarios, Intendentes, etc.) venían del mundo privado y de las Universidad de Elite, será la detonante que revierta las malas tendencias y el “Gobierno con Eficiencia” incluye:

- sacar a todo funcionario público que no se justifique en sus funciones, lo mismo que el mercado hace con todo aquel que no cumple con excelencia en su puesto de trabajo en el mundo privado.

- poner en la cárcel a todo aquel que infrinja la ley y el Estado de Derecho así lo estipule, pero sin salir a justificar después su accionar.

- y fundamentalmente, sacar al Estado de la vida de las personas, abriendo el espacio a la creatividad y al desempeño personal, que cuando sea nacido desde la máxima capacidad individual, siempre existirá el financiamiento de la idea.

Las oportunidades se crean y mueren todos los días y a cada momento en el orden de la naturaleza, pero cuando existe un techo que cierra el espacio y limita la exposición de las personas a la amplitud total, aturde los sentidos más necesarios para poder desarrollar las máximas capacidades.

Hay un orden urbano y social que custodiar, es el estado de derecho y hay ciertas funciones supervisoras y subsidiarias que cumplir. Sólo en esas tareas el Estado debe desplegar su acción.

Para todo lo demás, estamos las personas, que por naturaleza obraremos bien y buscamos la felicidad propia y de los que amamos.